El evangelio es la Buena Noticia de salvación y redención para la humanidad. Estamos separados de Dios debido al pecado pero Jesús vino a reconciliar esa relación a través de su muerte en la cruz y su resurrección.
“Hay paz con Dios por medio de Jesucristo, quien es Señor de todo.” Hechos 10:36
Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), Efesios 2:5
Esto es algo digno de compartir con más personas y es más fácil hacerlo cuando lo vivimos y entendemos. En 2 Corintios 5:20 se nos dice que somos embajadores de Cristo. “Hablamos en nombre de Cristo cuando les rogamos: «¡Vuelvan a Dios!».”
Aquí hay cinco pasos que te ayudarán a mejorar la manera de compartir de Dios:
1. Establece el corazón correcto
- Compartir las Buenas Nuevas no es algo que se le ocurrió a un Pastor, no es un programa o una buena estrategia de las Iglesias, El evangelio es lo más cercano al corazón de Dios, ya que expresa su naturaleza, su carácter y su deseo de acercarse al mundo entero.
- Antes de compartir tu fe ora por esa persona, pídele al Espíritu Santo que te guie y te de sabiduría para representar correctamente a Dios para amar y extender su gracia para con esa persona.
Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. 20 Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos». Mateo 28:19-20
2. Sé intencional
- Sé consciente y deliberado en tus palabras en lugar de actuar por inercia, elimina o reduce las distracciones y procura tener toda tu atención en el momento. Intenta ajustar tus acciones según sea necesario. La intencionalidad implica ser flexible y adaptarse a medida que surgen cambios en la conversación.
3. Ten conversaciones profundas
- En Cru.org hemos desarrollado herramientas digitales que te ayudarán a crear un ambiente propicio para iniciar conversaciones donde puedas compartir tu fe al hacer preguntas significativas, divertidas e interesantes. Recuerda poner atención siendo respetuoso con las respuestas, escucha la perspectiva y el interés que cada persona tiene acerca de Dios y de otros temas.
4. Sé claro y conciso
- Una vez que hayas establecido un diálogo, habla del Evangelio con entusiasmo y pasión. Explica cómo ha cambiado tu vida (puedes compartir tu testimonio). Evita abrumar a la otra persona con demasiados detalles al principio. Comienza con una descripción general y luego profundiza si ves que están interesados. También puedes ilustrar tus puntos con ejemplos concretos o anécdotas personales. Esto puede ayudar a la otra persona a conectarse emocionalmente con lo que estás compartiendo.
5. Mantén la comunicación abierta y fomenta la amistad
- Después de la conversación, mantén abierta la posibilidad de seguir hablando sobre el tema en el futuro. Puedes averiguar si tienen preguntas o enviarles recursos relacionados “Cada Estudiante” y “Yo Enfrento.com” son herramientas que puedes utilizar.
- Además, puedes invitar a la otra persona a unirse a ti en alguna actividad, puedes sugerir hacer algo juntos relacionado con sus intereses, como ver una película, asistir a un evento o probar una actividad nueva para fomentar y fortalecer la relación y crear nuevas oportunidades para testificar de Jesus.
- Recuerda que el objetivo principal es establecer una conexión genuina y representar correctamente al Padre, independientemente de si acepta o no del Evangelio.
Yo planté la semilla en sus corazones, y Apolos la regó, pero fue Dios quien la hizo crecer. 7 No importa quién planta o quién riega; lo importante es que Dios hace crecer la semilla. 8El que planta y el que riega trabajan en conjunto con el mismo propósito. Y cada uno será recompensado por su propio arduo trabajo 1 Corintios 3:6-8Imágenes: https://www.office-hub.com/uk/news/your-coworking-space-is-the-new-talent-pool https://inkforall.com/ai-writing-tools/growth-marketing/growth-marketing-team-structure/